La Mona Jiménez recordó su experiencia al borde de la muerte: “Estuve cinco meses en coma, no sabía si vivía”
Invitado a Otro día perdido (eltrece), el programa de Mario Pergolini, Carlos “La Mona” Jiménez recordó el episodio que lo tuvo al borde de la muerte y del que logró recuperarse “de milag...
Invitado a Otro día perdido (eltrece), el programa de Mario Pergolini, Carlos “La Mona” Jiménez recordó el episodio que lo tuvo al borde de la muerte y del que logró recuperarse “de milagro”.
El hecho se remonta a 1972, mucho antes de los problemas de salud que debió afrontar el icónico cuartetero, como cuando le extirparon el bazo en 2023 durante una cirugía de urgencia, o, ese mismo año, cuando le colocaron un stent y le realizaron un cateterismo porque su carótida estaba cerrada.
Aquella ocasión que relató anoche a Pergolini sucedió durante un partido de fútbol a principios de la década del 70: “Cuando voy a la cancha de Belgrano me pegan un botellazo, estaba peleando la hinchada contra los cocacoleros y se agarraron a puñetes. Era el cuadrangular: jugaba Huracán con Belgrano, y anteriormente habían jugado Talleres con Boca”.
“Yo me subo para ver y me pegan un botellazo fuertísimo en la sien, rodé y chau. Llegué hasta el auto, tenía un Falcon que, según Juana , lo tocabas y te agarrabas tétanos por lo oxidado que estaba, era un auto muy viejo", detalló el cantante.
Sin embargo, Jiménez no acudió de inmediato a un centro de salud, lo que empeoró el cuadro: “No salía sangre, nada, era interior. Fui al auto, me puse hielo porque me dolía mucho la cabeza, llegué al departamento en Vélez Sarsfield 272 y me quedé dormido”.
Sus siguientes palabras dejaron atónito al conductor televisivo: “Estuve cinco meses en coma, no sabía si vivía o moría”. “Me habían cortado el nervio de coordinación. No sabés quién sos, estás muerto en vida”, recordó el ídolo popular.
“Nunca vi al diablo, ni a Dios”Fue gracias al accionar del neurólogo Juan Carlos Carranza, el más joven que había en ese momento, que logró salvarse. El profesional dijo que había que operarlo inmediatamente, pese a que el resto de sus colegas prefería esperar al día siguiente. “Se seca esa venita y mañana este muchacho queda como un vegetal”, rememoró sobre las palabras del médico.
“Me operaron, estuve cinco meses en coma. Un día me desperté, me bajé de la cama y e hice mis necesidades ahí en el piso. Decían: ‘milagro, milagro, se despertó’. Tuve un año de rehabilitación, comía con la mano, quería entrar al baño y me pegaba con la pared, hasta que se fue acomodando mi cabeza, gracias a Dios”, concluyó La Mona Jiménez sobre aquel fatídico episodio que casi le cuesta la vida.
Durante una entrevista con LA NACION en octubre del año pasado, el músico cordobés mencionó esa misma anécdota y señaló: “Una vez me estuve por morir, pero no había tenido conciencia. Nunca vi al diablo, ni a Dios, ni luces, ni nada”.
Además, habló sobre los distintos problemas de salud que lo aquejaron en los últimos años y reconoció que tuvo mucho miedo de morir: “Tuve un cagazo grande”.
A continuación, enumeró la sucesión de internaciones que lo tuvieron en vilo entre 2023 y 2024: “Juana me cuida mucho. Siempre tuve muy buena salud, pero después de la pandemia y de las cinco vacunas tuve un montón de problemas. Primero se me rompió el bazo, empezó a sangrar. Casi me muero, me salvaron por minutos. A los 15 días, un problema en la carótida. No me pasaba agua al tanque. A los pocos meses, un problema en la retina. Yo decía: ‘si paso agosto, ya está’ y antes de agosto, otro problema. Entonces pensaba: ‘acá cago’, pero no, seguí”.
Respecto a sus hábitos saludables y el cuidado de su cuerpo, resaltó que hace natación todos los días y bicicleta en el agua. “Antes hacía 80, 120 kilómetros, pero después de un accidente no puedo más, me mataba el ciático, me quedó una hernia de disco. Sigo adelante, gracias a Dios, a Juana, a mis hijos, a mis nietos. Y, obviamente, también al público”.